Restauración del bosque de niebla

A partir de la década de 1960, la mayor parte de lo que ahora es Las Cañadas, fue deforestado para introducir vacas y borregos (ganado vacuno y ovino).

En 1995, tomamos la decisión de revertir este proceso y realizamos las siguientes acciones:

  • Sacar a las vacas y borregos de todas las zonas con pendientes susceptibles a ser erosionadas por el ganado (la mayor parte del rancho).
  • Sembrar 50,000 árboles de especies nativas (Encinos, nogal, liquidámbar, fresnos y Hayas) en 60 hectáreas (restauración activa).
  • Permitir la «regeneración natural» del resto del rancho  (restauración pasiva).
  • Seleccionamos 40 hectaréas para usos ganaderos (vacas de leche) y agrícolas.

Este proceso ha sido monitoreado por científicos del Instituto de Ecología (INECOL), puedes ver algunas de sus investigaciones en la sección de investigación biológica.

Resultado:

  • Donde se sembraron árboles, se aceleró el proceso de regeneración y se logró formar un bosque mucho más rápido.
  • El pasto estrella que se había sembrado en varias partes del rancho para alimentación del ganado, «canceló» el proceso de recuperación y aún después de años, sigue existiendo.
  • En las zonas de «restauración pasiva», sacamos a las vacas demasiado pronto, creemos que si las hubiéramos dejado un par de años, éstas hubieran comido el pasto y la hierba que dejan hubiese sombreado el pasto, lo que hubiera permitido una más pronta recuperación.
Siempre hemos contado con viveros para ir reproduciendo las especies nativas y constantemente se siembran árboles, no sólo en las zonas de protección y de manejo forestal, sino también en las zonas ganaderas y agrícolas, con el uso de «sistemas agroforestales».

Las fotografías que te mostramos a continuación, hablan por sí solas de cómo se ha ido dando el proceso de regeneración ecológica, gracias a un ejército de murciélagos, aves, mamíferos y el viento, que lo han apoyado.

En las siguientes imágenes, el investigador Juan Manuel Díaz-García y su equipo, comparan algunos resultados ecológicos de las dos estrategias de restauración que realizamos en Las Cañadas (activa y pasiva), utilizando como indicadores de éxito a los anfibios, escarabajos del estiércol y los anfibios. En resumen, ambas estrategias tienen resultados muy similares. Sin embargo la restauración activa fue más relevante para la recuperación de especies animales especialistas del bosque de niebla, incluidas varias especies amenazadas.

Más información: https://journals.plos.org/plosone/article?id=10.1371/journal.pone.0242020