La cosecha de la madera la llevamos a cabo en luna nueva ya que es el momento en que la savia se encuentra en las raíces y el fuste tiene menos contenido de agua, con lo que al secarse sus fibras quedan más cerradas, lo que ayuda a que la madera que se obtiene resista más al deterioro y al ataque de los insectos xilófagos (termitas).

Otra práctica dentro de nuestro manejo es el direccionamiento del derribo para evitar que sean afectados los árboles que quedan en pie y sólo retirar el árbol que ha llegado a su turno de cosecha.

El acarreo lo realizamos con tracción animal (yunta) para hacer el menor daño posible a la vegetación y al suelo. De esta forma, los acercamos a las zonas donde la topografía nos permite instalar un aserradero portátil para maquilar la madera y transportarla a la zona de secado y almacenamiento. Todo esto con la finalidad de tener el menor impacto posible en el bosque.

Bodega para madera

También tenemos proyectado en el mediano plazo, la construcción de una secadora solar, lo que nos permitirá reducir el tiempo de secado y el desperdicio por grietas o torsiones con el uso de una tecnología limpia. Asimismo, se prevé la instalación de un sistema autoclave para dar un tratamiento de preservación a la madera con sales de boro, estamos en busca del financiamiento.